Se estima demoler 400 viviendas que han sido consideradas por el Instituto Municipal de Gestión de Riesgo y Administración de Desastres (Imgrad) como estructuras vulnerables de alta peligrosidad. Las autoridades admiten que la dimensión de la tragedia de los últimos días del año 2010, obedeció a que muchas de las viviendas en la zona fueron construidas irregularmente en espacios de riesgo en las faldas de las montañas.
Desde el inicio de la carretera vieja Caracas La Guaira, la Milicia Bolivariana viene haciendo un trabajo de hormiguita, acompañando a las autoridades competentes para la demolición de las casas afectadas por las lluvias que se encuentran en situación de riesgo. Se inician diariamente los recorridos a pie, casa por casa, buscando información de donde o en que refugios están las familias que habitaban esas casas, una vez obtenida la información pertinente, se procede a marcar las casas, para que a la brevedad posible sean demolida.
La demolición de esas casas en situación de alto riesgo que se encuentran ubicadas en la carretera vieja Caracas La Guaira depende de la Alcaldía de Caracas en conjunto con el Gobierno de Distrito Capital, todo esto con el objetivo es continuar las labores para salvaguardar las vidas de las familias que allí habitaban. El trabajo de demolición es con el esfuerzo de aproximadamente 30 trabajadores, herramientas manuales y maquinaria pesada.
En la medida que vaya avanzando la demolición, se están haciendo trasladados de camiones al lugar para retirar los escombros y cercar la zona a fin de evitar futuros asentamientos. Es un trabajo cuesta arriba pero tratamos de agilizar la ejecución con la experiencia de los trabajadores en esta materia.
La situación de estructuras sin derrumbar afecta también el tránsito vehicular, por dos razones muy simples, una es que las autoridades cercan los perímetros de estos inmuebles por seguridad, bloqueando la carretera para que las maquinas pesadas hagan lo suyo.
Por otra parte la carretera se está cayendo, cada día que pasa la situación se agrava más, la vía esta partida casi en dos pedazos, y aunque vecinos y autoridades saben la problemática no hay quien detenga el paso de grandes camiones a cada momento por la zona.
La demolición se hace necesaria ya que si se deja que esas casas se queden así, las vuelven a habitar y son una gran cantidad entre derrumbadas, semi derrumbadas y en situación de riesgo. Debemos ir atendiendo cada una de las situaciones según el nivel de la complejidad que tenga.
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